La gestión de alquileres temporarios es una tendencia en auge ya que la mayoría de estos alquileres están destinados a fines turísticos y laborales. Por esto, en este post te resumimos los aspectos elementales de la gestión de alquileres temporarios: comisión, requisitos y aspectos legales y software
Comisión de alquileres temporarios
En este punto debemos hacer una diferencia entre la comisión regulada para la inmobiliaria y para el inquilino. La nueva ley de alquileres para alquileres temporarios establece una comisión que va desde el 0 al 5% para locadores. Esto supone que el locador (o inmobiliaria) tiene derecho a aplicar estos porcentajes sobre el valor regular que tendría un alquiler no temporario.
Esto a lo que respecta cuánto cobra una inmobiliaria de comisión por alquiler temporario. Los particulares que tienen inmuebles disponibles para alquiler temporario se deben manejar con los mismos porcentajes, siempre y cuando el contrato de alquiler tenga valor legal real y esté regulado por la ley de alquileres vigente.

Por otro lado, los locatarios son los que sufren un fuerte incremento en la comisión de alquileres temporarios. La gestión de alquileres temporarios 2021 establece que los inquilinos deben pagar una comisión adicional que va desde el 18 al 20% sobre el valor regular de un alquiler no temporario.
Requisitos
Según lo establecido para los alquileres temporarios en la nueva ley de alquileres, un contrato de este tipo no tiene que tener una duración mayor a 3 meses. Por otro lado, el valor total de la estancia debe estar explicitada en el contrato, con los impuestos aplicados y las responsabilidades tanto del locador como del locatario.
En caso que exista algún tipo de cobro en concepto de garantía, este debería estar debidamente especificado en el contrato de alquiler.
Por último, se debe realizar un inventario de todo el mobiliario que se deja en la propiedad. En la mayoría de los alquileres temporarios, los inmuebles vienen amoblados ya que la persona suele realizar una estancia corta. Entonces, a lo que respecta la gestión de alquileres temporarios, tanto la duración del contrato, como el monto del alquiler y el inventario del inmueble deben estar especificados en el contrato.
Aspectos legales de los alquileres temporarios
Como mencionamos anteriormente, los contratos de alquileres temporarios no pueden exceder los 3 meses y cualquier inmueble no puede ser destinado para ser alquilado temporalmente por un periodo que exceda a los 3 años consecutivos. Si el plazo del contrato o de los contratos consecutivos supera los tres meses, se presume que no fue hecho con esos fines.
Esto es algo que hay que tener en cuenta para no cometer fraude a la ley de alquileres que puede ser penalizado. En las inmobiliarias, la gestión de alquileres temporarios debe estar reglamentada y de acuerdo a las leyes vigentes.
Por otro lado y para finalizar, es necesario que los propietarios que usen sus inmuebles para alquileres temporarios deben tener un seguro de hogar propio de estos tipos de alquileres. Se debe tener en cuenta que los seguros de hogar varían drásticamente entre seguros para alquileres regulares y alquileres temporarios.
Software para alquileres temporarios
Uno de los mejores softwares para la gestión de alquileres temporarios es Hornero, una plataforma integral para la gestión de alquileres y contratos. Con Hornero, podrás llevar un registro exhaustivo de los diferentes inquilinos. Este es un aspecto importante debido a que hay mucho flujo de inquilinos en este tipo de alquiler.

Además, con Hornero podrás gestionar automáticamente los contratos para cada nuevo alquiler, llevar registro de las diferentes propiedades y realizar la facturación electrónica directamente desde la plataforma. Hacé clic acá para conocer todas las funcionalidades de Hornero.
Conclusión
La gestión de alquileres temporarios comprende aspectos un poco diferentes a lo que respecta a los alquileres regulares. Como ya vimos, los alquileres temporarios sufren de comisiones diferentes a los alquileres regulares que por lo general son un poco más bajas. Por otro lado, los requisitos y los aspectos legales también varían y se debe tener en cuenta qué aplica a cada caso.